Tras acabar el concierto entramos en las fosas del Claustro sigilosamente.
Habíamos leído que por un túnel allí se llegaba a La Torre Negra. Conmigo iba Domènec Miquel, “la biblia de Sant Cugat.” Él no respaldaba esta tesis, no obstante, era feliz de entrar de noche. Quedamos quietos al bajar, la inmovilidad era un precio mínimo a los nervios. De pie, en la entrada estaba el Abad Biure, quien sonriendo nos dijo: -Esta entrada solo está abierta para vosotros, otros no podrían ni siquiera pretenderlo. El hijo de Berenguer de Saltells os llevará hasta La Torre Negra, lean los caracteres en latín de las paredes. Domènec al andar susurró: – ¡No puede ser!, Biure fue asesinado por Saltells la navidad de 1350. El conocimiento de este lugar tiene más argumentos reales que este diálogo que es la fachada de un sueño, o un deseo… ¡Despierta!… Fin de la hipnosis.
Arkolano