La parada de taxi

Otra semana más, el taxi me deja en la parada de siempre;en el callejón, el gato me espera, pensando que hoy será el día.Pero otra vez le doy las sobras del desayuno, a la semana siguiente vuelvo a por él, pero no está, la bausra presente me dice:”se fue”; por más que te quería perfirió comida en condiciones a tus sobras .Ahí entendi que nada és para siempre.

Saul Sancho

La Carretera

Esa cegadora luz se acercaba a mi.Era como si un faro me estuviera persiguiendo.Yo estaba paralizado, demasiadas cosas me venían a la mente.Cuando por fin iba a reaccionar, fue demasiado tarde.Cuando desperté, me vi tendido en esa fría autopista, ese coche me atropelló.

Renault Kangoo

Las gafas perdidas

Juan estaba impaciente porque en su funda no estaban las gafas. Estuvo mirando por todos lados. En la mesa, el salón, la cocina, el baño… Pero ¿cómo era que buscaba tan bien? Juan llevaba puestas las gafas.

Pedro del Castillo

Misión completada

En el vestuario, después de ganar el Campeonato de Esapña aparece mi mejor amigo.-Felicidades y muvhas gracias por completar la misión. Se me empañan los ojos y le intento abrazar. Al no sentir el contacto me doy cuenta que no hay nadie, ñpero igualmente respondo con lágrimas y diciendo. De nada pequeñín, los abuelos están muy contentos desde el palco, lo conseguimos.

Alex Ruiz

La verdadera conexión

Dos amigos se enfadaron tres días antes de un viaje que reservaron y no podían anular.
Cuando llegaron al sitio, tenían que buscar el wifi. Como estaban enfadados cada uno buscó por su cuenta y no lo encontraron. Entonces se dieron cuenta de que antes de buscar la conexión wifi, tenían de buscar la otra conexión.

Tomas Agendas

La rapideza del tiempo

Ayer estaba aprendiendo a ir en bici con mi padre , hoy me piden que piense en que quiero ser de mayor . Siento que cada vez que pestañeo pasan los años volando . Si sigue así seré mayor y no me habré dado ni cuenta .Que tiempos aquellos cuando la única preocupación era traer la cartulina.

Sr Santasusana

La ciudad entre las páginas

Era ya tarde, sobre las cinco de la tarde, cuando me encontraba delante de una caja vieja en el desván de mi abuelo. Al abrirla, me di cuenta de que dentro había un cuaderno con páginas muy gastadas. Cuando empece a leerlo, me sorprendí al ver como las palabras iban cambiando ante mis ojos, como si se moviesen solas. La historia trataba sobre una ciudad secreta, escondida entre montañas, donde el tiempo no existía. Seguí leyendo sin pensarlo mucho, y de repente las palabras me absorbieron por completo, llevándome a ese mismo sitio.

ElBobo

Las galletas del tio

Estábamos jugando en frente de casa de la abuela con una sonrisa manchada de las galletas que nos solía hacer el tío. Pero esta vez no, esta vez estábamos en un descampado rodeados de soldados alemanes.Te miré hermano mio y me pregunté. ¿Qué hemos hecho mal?

Boixo

Xispi

Era una vegada, un petit ocell anomenat Xispi que vivia al parc central amb els seus pares i germans. Un dia d’hivern, la seva família va emigrar a un país més càlid i es va quedar sol.En aquells dies de soledat, l’agradava estar prop dels nens de l’escola bressol.Un dia va observar que la nena més petita, la Clara, va plorar quan li va caure el gelat que estava berenant. Xispi, sense dubtar-ho, s’hi va apropar i va cantar una cançó.La nena va canviar les llàgrimes per un gran somriure.Xispi havia trobat la seva missió: “fer somriure als nens de l’escola bressol”.Els nens l’adoraven. Xispi havia trobat una nova familia; ja no estaria mai sol.

Roure

En travessar la porta

Vaig girar el cap enrere i allà estava, el meu millor amic dels últims deu anys. M’acabava d’acomiadar d’ell. El seu visatge abatut em compungí. Però havia de seguir al vigilant. Les meves cames tremolenques travessaven lentament aquell passadís inacabable. En arribar al final, el vigilant m’obrí una porta plena de barrots. Em punyia la inseguretat i el neguit. Volia cranquejar, però sabia que no podia, havia arribat el meu moment. En travessar la porta, un raig de llum em va cegar. Els meus peus notaven la calor del sol. Feia moltíssim que no pisaven paviment. Desconcertat per no sentir-me feliç, notava que la meva ànima s’havia quedat allà dintre, lliure del meu cos.

Susy Art