Sentado al borde del abismo.

Fuego, calor, ya solo quedaba la madera de lo que algún día fue mi paraíso. Miedo, desesperación, esa sensación de que todo tu mundo siempre hubiese estado sustentado por pilares de arena. Terror, pero sin llantos, porque, al fin y al cabo, dentro y fuera de este decadente palacio en llamas, ya no quedaba nadie para consolarme y hacerme olvidar que todo esto no ha servido para nada.

Hosea Mattews

Duelen por dentro

La lluvia parecía diferente esta vez. Salí de casa y ya la primera gota fue como un puñal por la espalda. Pero no era lo peor, cada gota, al golpearme me hacía recordar cada insulto, cada mala pasada, cada humillación que había hecho hasta ahora, entendí que por fuera no dolía, pero por dentro corroía. Entré otra vez a casa y me quedé pensando, no lo hacía como broma, lo hacía por un odio interior que no conocía.

Jimmy White

Fantasma

Entre el abrir y cerrar de los cajones, y el movimiento anormal de mi armario, me llevaron a pensar que estaba loco. Hablé con un amigo, y me prometió que iba a librarme de los fantasmas, como yo los llamaba en ese entonces, y buscar el motivo por el cual se estaban manifestando.Me llevó a lugares en los que tenía recuerdos felices, y otros en los que me dieron ganas de morir. Fuimos al hospital, tormentos tenía yo de ese lugar, le pregunté a Billy, “¿Qué hacemos aquí?”Él respondió:” En este lugar, murió tu mujer, y tú más tarde también lo hiciste”. Al darme cuenta, giré la cabeza y la ví.

El fantasma de los relatos

La vaquita

Un sabio iba caminando con un discípulo por el bosque, allí vivían una familia que vivían de lo de lo que generaba una vaquita, ellos vivían con el agua al cuello. Entonces el sabio ordenó a sudiscipulo que la tirase por un precipicio, un poco confundido el la tiro.El discípulo decidió volver después de 5 años a ver a la familia y a pedirles perdón por lo de la vaquita, cunado llegó se dio cuenta de que eran ricos y la familia le dio las gracias por haber matado a la vaquita ya q sino seguirían pobres

Celda 710

Una perdida dolorosa

Era de noche. Condiciamos en una carretera solitaria. Mi hermano y yo llorabamos la muerte de nuestros padres. Él culpaba a los conductores que les chocaron. Y yo, le creía.Sin verlo. Un camión nos chocó. El coche comonzó a girar. Estallándo en llamas. Conseguí escapar. Mi hermano, no sufrió la misma surte. Me suplicaba que le sacara. Con una sonrisa le dije, -todo ha salido como esperaba-.

Juan de Francisco

El intermitable camino

Una mujer a mi lado está. Yo no sé quién es. Corro para escapar hacia un lado con todas mis fuerzas, pero su mano y mi mano son inseparables. Ella me dice que me esté quieto, pero yo no puedo. La inseguridad de no saber quién es no me deja dormir; no puedo pegar ojo. Todos mis sueños hablan de ella, pero justo cuando la miro a la cara, algo me recorre por el cuerpo y me despierto. Sin embargo, un día, al despertar de ese sueño, que era igual cada día, ella no estaba. Me sentía perdido, como un niño pequeño sin sus caramelos. No puedo parar de pensar en ella. Lo único que puedo hacer es pensar en su olor y en cómo ella y yo recorríamos este camino de flores interminables.

Devon Dotson

Encapotados

Días sin fin, en esta oscuridad que nos atrapa. El run-run en mi cabeza es intenso como su oscuridad ahí arriba. ¿Dónde estará la luz? Quizás de viaje como el que nunca vuelve. Són dos semanas ya que parece Dubín. Por fín ha llegado la luz que ilumina toda nuestra vedad.

El sospechoso

La nostalgia

Cada Navidad la mesa estaba llena. Mis tíos contaban chistes malos y mis primos y yo reíamos, mientras la abuela nos servía un exquisito plato.Los años pasaron y la misa se fue quedando vacía. Primero mi hermano y después dos de mis primos se fueron a vivir fuera. Me he dado cuenta de que aunque algunas cosas cambien no deben ser peores.

Pedro de Juan

La Traición

Otro dia más en el trabajo duro. Me viene el primer cliente, todos los dias es el mismo, me comenta que tiene un amor muy grande por las pizzas, como yo, y necesita siempre su buena pizza de mi pequeño y humilde restaurante. A la semana, dejó de venir, el cartero me dijo que habían abierto una pizzeria nueva mejor que la mia y que mi cliente principal se había ido. El cartero me dijó que a veces la gente te cambia por algo mejor.

Torres Catalan