Y allí estaba, en medio de aquella sala tan gigantesca y con tanta luz y colores. En esa sala, sin ventanas ni relojes pensando en la única palabra prohibida allí dentro, el tiempo. Derrepente me fijo en las pocas monedas que me quedan y grito:”¡Todo al negro!”.

TOVIXI

El hombre del manto me seguía a todos lados, no era ni mi amigo, ni siquiera un conocido. Le gustaba plantar ortigas en mi camino para que mis pies descalzos sintieran dolor mientras con un látigo llenaba mi débil cuerpo de heridas. Con mis últimas fuerzas, llore y balbucee ‘por tu culpa, a los ya fallecidos por ti envidio. Depredador pobre, sin garras ni dientes, tú eres el que pide lo que en realidad no busca’. Sin nada mas que decir, guarde mi látigo y me tape con un manto de lágrimas y busque a otro más que consuele lo que yo me hice.

Arzapalo

El último minuto El caos, la ansiedad… Poco a poco siento que no puedo más. La nuez se aprieta en mi tráquea, el sudor resbala por mi frente, mientras un dolor intenso invade mi pecho. Mis manos empiezan a temblar y mi cerebro se colapsa.No puedo más.Las horas pasan como minutos y los minutos como horas . Miro el reloj: 11:59. Intento ir más rápido pero,no puedo huir.Un murmullo fuerte y constante alborota mis pensamientos. Mi corazón se acelera y veo como se acerca .Y entonces, él está a mi lado.Me mira y me dice:—Pep, has acabado el examen

Estoy en my prime

Casi 4 años habían pasado desde aquello, no transcurría una noche en la que no pensase en ello; los pensamientos me atormentaban. Venían y se iban tan rápido que no me daba tiempo de materializarlos en mi mente. De repente, me sentí cayendo a un abismo y el tiempo pasaba más lento, hasta que llegué a un punto donde ni caía ni el tiempo pasaba; estaba en el limbo. De repente sentí como una voz susurraba mi nombre.

Pedro Libro II

Marc se levanto de la cama temiendo ver las notas,antes de verlas se fue a desayunar. Luego de desayunar volvio a la habitacion,despues encendio la pantalla de su movil con miedo,habia estudiado, pero algo dentro de el decia que no era suficiente,sus manos sudaban,su respiracion entrecortada y el corazon latia cada vez mas rapido. Decidio apretar el boton, la pantalla parpadeo antes de mostrar,pero no entendio lo que vio, solo supo que el miedo no provenia de las calificaciones sino la ansiedad esperar de esperar tanto tiempo,¿y si no estaba listo?

de Villares

Estaba en casa solo y hacía una brisa muy fría. Fui a ver si había ventanas abiertas, pero, para mi sorpresa, estaban todas cerradas. Así que comencé a preocuparme por el frío que hacía.Eso parecía el Polo Norte. Con preocupación miré por todas partes,pero nada. La única posibilidad que había era que estaba paranoico o loco,cosa que poca gente dudaría. Pero tenía una misión, y esa era encontrar de dónde salía esa brisa. Me puse a trabajar, pero no encontraba nada, absolutamente nada. Comencé a gritar de ira por no encontrar el motivo. Unos segundos después de gritar cosas como “¡soy tonto!”, al final llegué a la conclusión de que lo era, al ver que no llevaba ropa, que estaba desnudo.

Platano

El pequeño Juan era como cualquier otro niño: iba al colegio, hacía los deberes, jugaba con sus amigos…Pero se hacia mayor y el tiempo pasaba velozmente. Un dia, después del colegio, notó una sensación que nunca antes había sentido: la atraccion hacia una chica. Conforme se hacía mayor iba teniendo novias, pero siempre acababa terminando la relación. Llegó a tener muchas parejas, pero nunca estaba más de un mes con ellas. Quería olvidarse de cada desengaño, pero no lo conseguia. En el momento de su último suspiro, se dijo a sí mismo: “Es tan corto el amor y tan largo el olvido”.

Trebla Atagib

Desperté solo, en una habitación oscura, en donde no se veía nada. A mi lado, había muchas sillas con cuerdas encima. Él entró y me desató. “Tu turno”, dijo. Me llevó a rastras al balcón. Ví a la policía, a los periodistas, todo el mundo estaba observando. Yo y un tipo con pasamontañas. Finalmente, un agente tumbó la puerta. Simplemente ví como mi cuerpo caía a cámara lenta. Mientras caía, miré abajo,y ví un container. Por alguna razón pensé que me salvaría. Y… mi padre me llamó para comer, tuve que quitarme las gafas de realidad virtual. Todo, finalmente terminó.

Hamburguesa con queso