Somos un instante en este lugar. Una simple milésima de segundo transcurre hasta acabar la vida. Algunos le llaman existencia, otros sencillamente le llaman momento. Desde que te conocí, ese instante lo recuerdo como una noche estrellada, perdidos en la arena de la playa bajo la luz de la luna. Me dejo llevar y dejo mi mente en tus labios, sueño en un nosotros, en otro nuevo principio. El viento se lleva mis pensamientos y la arena se levanta con el viento. Desvanece ese recuerdo y mis lagrimas se dejan llevar hasta caer al mar. Esa noche entendí que mi estrella se había apagado para siempre.
Pseudònim: Moonlight